Con un enorme precio de US$250 millones, una casa en Beverly Hills sale a la venta esta semana y se convierte en la propiedad residencial más cara en EE.UU.
El desarrollador de lujo Bruce Makowsky presentó el miércoles la mega-mansión de 38.000 pies cuadrados (3.530 metros cuadrados) ubicada en 924 Bel Air Road, un enclave ultra exclusivo de Bel Air en Los Ángeles.
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La mansión, que tomó más de cuatro años en ser construida por un equipo de 250 personas, cuenta con vistas sin obstáculos de 270 grados que abarcan desde montañas cubiertas de nieve hasta el Océano Pacífico y el horizonte de Los Ángeles en el medio.
Ésta casa, que saldrá a la venta esta semana, superará la ex mansión de Aaron Spelling en L.A., que tiene un precio de US$200 millones, y se convertirá en la propiedad más cara para la venta en EE.UU., de acuerdo con Realtor.com. Además, se ha informado que una propiedad de 74.000 pies cuadrados (6.874 metros cuadrados) en Bel Air podría llegar a un asombroso precio de US$500 millones, pero todavía está en construcción.
Pero, ¿qué se obtiene por todo este dinero? Para empezar, los compradores no tendrán dificultad para alojar a un gran número de huéspedes con dos master suites, 10 suites VIP de gran tamaño y 21 baños de lujo, según un comunicado de prensa.
También está construida para entretener con 17.000 pies cuadrados adicionales (1.579 metros cuadrados) de áreas de entretenimiento, tres cocinas gourmet, cinco bares, una piscina de borde infinito de 85 pies (25 metros), un teatro de 40 asientos, así como bolera de cuatro carriles.
Y eso no es todo. También hay una galería con autos valorados en más de US$30 millones, personal de siete personas de tiempo completo, más de 100 instalaciones de arte seleccionado por expertos, una pared con gran variedad de dulces, un spa y un centro de entrenamiento de última tecnología. El precio de la casa incluye siete empleados capacitados para los dos primeros años, así como la colección de automóviles.
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"Ésta casa fue diseñada para un multimillonario que quiere lo mejor de todo lo que existe en la vida", dijo Makowsky. "Hasta ahora, en el mercado del ultra-lujo no existían casas que incluso llegaran a igualar el nivel de mega-yates y aviones privados en los que los millonarios gastan millones de dólares en cada año.
"Se crean cientos de nuevos multimillonarios cada año y cada vez se están fijando más en este codiciado enclave de California por todo lo que el estado tiene para ofrecer", agregó.