La compra de tierra tiene ventajas para los inversionistas de propiedades de lujo

Hay algunas veces en que un comprador de alto patrimonio puede considerar comprar un terreno en lugar de una casa terminada.

La primera es cuando quieren algo verdaderamente único. Una compra de terrenos, ya sea en una isla privada o en una propiedad de esquí, puede ofrecer ese lugar perfecto, uno en un millón, en el cual construir una casa de vacaciones que se pasa de generación en generación.

Los compradores de alto patrimonio neto también pueden considerar comprar una tierra cuando no pueden encontrar una residencia principal que ofrezca todo lo que están buscando.

"Las personas de este calibre son muy exigentes y tienen necesidades muy específicas", dijo Santiago Arana, socio de la firma The Agency, con sede en Los Ángeles. "Si bien muchos de ellos prefieren comprar una casa terminada, algunos no encuentran lo que están buscando, especialmente cuando el inventario es muy bajo en el mercado de alta gama".

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Y si no pueden encontrar lo que quieren, la otra opción es comprar para demoler o comprar un terreno donde puedan construir la casa de sus sueños desde cero, dijo.

Y luego, hay inversionistas que podrían comprar tierra sin desarrollar si quieren construir una casa específica o elegir un terreno más grande con múltiples parcelas que puedan desarrollar con socios para obtener mayores ganancias potenciales.

En cada uno de estos casos, y en cualquier compra de propiedad, dijo Arana, la ubicación es el factor individual más importante. A partir de ahí, encontrar un terreno grande y llano, que lo haga más fácil y menos costoso de construir, debe estar en la parte superior de cualquier lista de deseos de los compradores de tierras.

Con estos factores cubiertos, decidir si una compra de tierra tiene sentido a menudo se reduce a consideraciones de estilo de vida para las personas que desean construir una casa de vacaciones; presupuesto y el tiempo que se requiere para las personas que consideran construir una residencia principal; y para los inversionistas la posibilidad de obtener ganancias .

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Encontrar una ubicación sin igual

Comprar un terreno para construir una casa de vacaciones ofrece al comprador la oportunidad de encontrar exactamente lo que está buscando, ya sea que se trate de una privacidad completa, de vistas deslumbrantes, de una gran área sobre la que se puede construir o de todo lo anterior, como el terreno de 425 acres en Aspen  (172 hectáreas) que el agente de Douglas Elliman Max Taam está vendiendo (por US$30,845 millones).

Situado en la parte trasera de Aspen Mountain, esta enorme propiedad está disponible por primera vez desde que se inauguró el Aspen Mountain Gondola en 1986. "Básicamente, usted tendría su propia área de esquí privada si comprara esta tierra", dijo Taam, señalando que Aspen Mountain Powder Tours actualmente opera equipos de esquí privado en el área. O solo una parte, ya que la propiedad se puede vender en su totalidad, o en piezas más pequeñas, ya que se divide en ocho parcelas que tienen entre 23 y 160 acres de extensión (de 20 a 60 hectáreas).

"Esta es probablemente la segunda propiedad de Aspen de alguien", dijo Taam, y señaló que la mayoría de los compradores interesados ya tienen una casa de 10.000 a 15.000 pies cuadrados (929 a 1.393 metros cuadrados) en la cercana Red Mountain, o un bonito penthouse en el centro de Aspen.

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"Si bien es un proceso desafiante para reconstruir allí, también es más gratificante y dará como resultado que una propiedad se transmita de generación en generación", dijo Taam.

Otra propiedad que ofrecería vistas y privacidad en una gran parcela de tierra es Carmel Valley en el condado de Monterey, recientemente popularizada como el escenario de "Big Little Lies" de HBO, donde el director de operaciones de Douglas Elliman en California, Peter Loewy, está trabajando con la agente Christine Handel para vender 104 acres (42 hectáreas) por US$1,759 millones.

Ubicado en una urbanización cerrada llamada Quintana Ranches, donde hay 13 lotes en total a solo 10 minutos de las tiendas y otras comodidades en Carmel-by-the-Sea, este terreno relativamente plano tiene vistas del Océano Pacífico hacia el oeste, raro para una parcela en medio del valle, y las montañas de Santa Lucía al sur y al este.

"Está lejos de toda la congestión", dijo Handel, "pero lo suficientemente cerca como para llegar rápidamente a Carmel si uno quiere estar allí".

También está alejado de los problemas de permisos que son comunes en la ciudad, por lo que uno tiene la flexibilidad de hacer prácticamente lo que quiera con el terreno, que está aprobado para dos sitios de construcción, probablemente una casa grande con una casa de huéspedes o granero de caballos, ya que el área es muy ecuestre, o incluso un pequeño viñedo. Se considera una ventaja que Loewy ya comenzó a trabajar en la infraestructura del sitio, colocando pozos y tanques y comenzando una aplicación para la energía solar. "Hay muchas opciones diferentes que puede usted tomar con esta propiedad", dijo Handel.

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Los que quieren construir la casa de sus sueños

Cuando Arana está trabajando con compradores radicados en Los Ángeles que están considerando comprar una casa terminada o un terreno para construir la propiedad de sus sueños, dijo que siempre ofrece el mismo consejo: si encuentran una casa terminada que les guste, incluso si tienen que pagar una prima por ella, y no es 100%, perfecto, deberían comprarla, dijo.

Esto se debe a que él mismo, como constructor de casas a la medida, sabe cuánto tiempo puede llevar construir una casa desde cero y lo caro que puede ser hacer las cosas bien. Por ejemplo, dijo, una vez que alguien compra tierras y pasa por el proceso de contratar a un arquitecto, diseñador y constructor, ya ha pasado un año. Luego tienen que obtener permisos de construcción y adherirse a las normas de construcción de la ciudad, que son confusas y cambiantes, al menos en L.A. Después todavía hay que construir la casa. "Si no sabe lo que está haciendo", dijo, "para cuando tenga la casa, probablemente ya no tenga las mismas necesidades".

Sin embargo, si alguien tiene el presupuesto y el tiempo y es realmente incapaz de encontrar lo que está buscando, la compra de terrenos puede ofrecerle la oportunidad de construir una casa que realmente le encanta.

Arana dijo que actualmente está vendiendo dos terrenos en la parte baja de Tigertail Road,"Probablemente la mejor calle en Brentwood", dijo. Es una propiedad de 3,4 acres (1,37 hectáreas), aproximadamente un acre de superficie plana (0,40 hectáreas). "Esta es una propiedad de primer nivel", dijo, "porque tiene la privacidad, la ubicación, las vistas y una buena cantidad de terreno llano. Eso es lo mejor".

Puesto en venta por US$22 millones, Arana dijo que ya tiene múltiples ofertas de usuarios finales que podrían construir "la mejor casa al oeste de la 405 [autopista]", así como también desarrolladores que desean construir dos casas y venderlas con utilidad. "El cielo es el límite", dijo.

También está vendiendo dos lotes en Pacific Palisades, ambos con amplias vistas del Océano Pacífico, que ya han pasado por el largo y complicado proceso de aprobación de construcción, dijo. Esto significa que un comprador de las parcelas de US$19 millones y US$17 millones, ya sea un usuario final o desarrollador, podría ahorrar muchos meses de frustración y comenzar a construir de inmediato, probablemente a un costo de US$900 a US$1.000 por pie cuadrado (entre US$9.684 y US$10.760 por metro cuadrado), dijo Arana.

Para las compras de tierras por inversión, considere las ganancias

Al lado de la tierra de Brentwood que actualmente está vendiendo, en una parcela con vistas mucho menos impresionantes, Arana dijo que también recientemente compró tierras y construyó una casa por US$1.000 por pie cuadrado (US$10.760 por metro cuadrado), que vendió hace unos meses por US$23 millones, o alrededor de US$1.600 por pie cuadrado (US$17.216 por metro cuadrado).

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Este es el tipo de proyecto que los desarrolladores están buscando en este momento, dijo, y señaló que cree que una casa en el terreno de Pacific Palisades se venderá por entre US$35 y US$40 millones.

Al otro lado del país, en Long Island, Nueva York, a medio camino entre Manhattan y Hamptons, se encuentra otro interesante terreno que está generando un gran interés entre los desarrolladores.

Aunque este terreno de 27,63 acres en Northport, que está en venta por US$6,45 millones, no tiene las impresionantes vistas que otros presumen, la ubicación es impresionante, en la cima de una colina en un entorno de bosque a pocos minutos de Long Island, según Kelley Taylor, agente de Douglas Elliman. También es completamente privado, dijo Taylor, señalando, "Vivo a menos de una milla de distancia (1,6 kilómetros) y nunca supe que esta propiedad existía hasta que me presentaron a los propietarios".

Al igual que muchas otras ventas de terrenos, esta propiedad se divide en dos parcelas de 6,46 acres y 21 acres (2,6 y 8,4 hectáreas). En una de ellas, hay una gran mansión de 6.500 pies cuadrados (603 metros cuadrados) que se construyó en 1907 y ha servido como un retiro privado de una familia del bullicio de Manhattan durante seis décadas.

Mientras que Taylor dice que ha despertado el interés de un usuario final que está interesado en comprar la casa y toda la tierra para su uso personal y un comprador chino que también está buscando usar la propiedad como segundo destino, lo que realmente ha interesado a los desarrolladores, dijo Taylor, es que la tierra tiene tres puntos de acceso y está dividida en zonas para 15 parcelas de 1 acre con viviendas unifamiliares.

Para llegar al precio de venta, dijo Taylor, consideraron la tierra como 15 lotes separados de 1 acre a US$350.000 cada uno, un rango medio para el área, y valoraron la casa por US$1,5 millones adicionales. Las buenas noticias tanto para los desarrolladores como para los usuarios finales es que la mansión no está en el registro histórico, lo que significa que no hay restricciones de renovación.

"Un desarrollador siempre está buscando el rendimiento más alto posible y cuáles serán sus costos", dijo Taylor.

"Pero esta propiedad es verdaderamente única", agregó. "No se sabía que este pequeño oasis existía tan cerca de la ciudad de Nueva York".

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